Las tropas ucranianas reconquistaron este viernes la ciudad de Jersón y reivindicaron una «importante victoria» ante Rusia, que anunció que había retirado 30 mil soldados de la región “porque primero está la vida de nuestras tropas”.
Jersón era la única capital que el régimen de Vladimir Putin había anexionado ilegalmente en casi nueve meses de invasión. Ahora la perdieron.
«Jersón vuelve bajo el control de Ucrania”, anunció en Facebook el ministerio ucraniano de Defensa, Oleksiy Reznikov, a la vez que llamó a los militares rusos que permanecen en el lugar a «rendirse inmediatamente».
El repliegue demuestra que «sin importar lo que haga Rusia, Ucrania va a ganar» la guerra, afirmó el ministro ucraniano de Relaciones Exteriores, Dmytro Kuleba.
Por su parte, el Parlamento ucraniano publicó en Telegram fotos de civiles ondeando banderas ucranianas en la ciudad.
Asimismo, el ministerio ruso de Defensa indicó que «cerca de 5 mil piezas de armamento y vehículos militares fueron retirados» de la margen occidental del río Dniéper, donde está situada Jersón.
Esta es la tercera retirada de envergadura que ejecutan las tropas rusas desde que invadieran Ucrania el 24 de febrero.
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