Cómo la filosofía estoica nos enseña a manejar la incertidumbre y a mantener nuestra integridad ante la falta de transparencia
En Venezuela, la situación post-electoral ha sumido a muchos en un estado de incertidumbre y ansiedad. Los ciudadanos esperan con impaciencia la publicación de las actas de votación mesa por mesa, un proceso que ha sido oscurecido por la falta de claridad y transparencia por parte del Consejo Nacional Electoral (CNE).
En este contexto de tensiones y dudas, la filosofía estoica nos ofrece herramientas valiosas para enfrentar la situación con serenidad y principios.
Los estoicos, filósofos de la antigüedad que valoraban la virtud y la razón por encima de las pasiones desordenadas, nos enseñan a enfocarnos en lo que está bajo nuestro control y a aceptar con ecuanimidad lo que no podemos cambiar. En el caso de Venezuela, mientras los detalles de las actas electorales siguen siendo un misterio, los ciudadanos pueden aplicar esta enseñanza concentrándose en sus respuestas y acciones personales.
La integridad y la honestidad son valores centrales del estoicismo. En tiempos de incertidumbre electoral, mantenerse fiel a estos valores implica no solo exigir transparencia y justicia, sino también actuar de manera coherente con estos principios, promoviendo el diálogo y la paz social, independientemente de las provocaciones y la desinformación.
Además, los estoicos nos recuerdan la importancia de la resiliencia. En lugar de ceder al desánimo por los obstáculos que surgen, nos invitan a ver cada desafío como una oportunidad para fortalecer nuestro carácter y nuestra capacidad de liderazgo moral. Esto es especialmente pertinente para los líderes y activistas que trabajan incansablemente por asegurar un proceso electoral justo y reconocido por todos.
En conclusión, mientras Venezuela navega por estas turbulentas aguas electorales, la sabiduría estoica nos ofrece un faro de esperanza y guía. Nos enseña a mantener la calma en la tormenta, a actuar con principios y a ver más allá del caos del momento, hacia un futuro donde la integridad y la justicia prevalezcan.
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