EDITORIAL
«La Lucha por Venezuela: El Temor del Madurismo Ante el Inminente Despertar Democrático»
En la larga travesía hacia la restauración democrática en Venezuela, ha habido incontables desafíos y obstáculos. Pero pocos tan evidentes y críticos como la reciente decisión del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) bajo la dirección de Maduro de anular las elecciones primarias en las que María Corina Machado (MCM) resultó la figura abanderada de la oposición.
Los vientos de cambio en Venezuela soplan con fuerza, y la sombra que se cierne sobre Maduro con el avance de MCM es el testimonio más palpable. Si alguna vez hubo dudas sobre la vulnerabilidad y el temor que residen en los pasillos del madurismo, este acto las disipa. La anulación es una evidencia incuestionable: Maduro teme enfrentarse a Machado en las urnas. Pero, ¿por qué? La respuesta es sencilla y a la vez profunda. Maduro percibe, con claridad meridiana, que una contienda con MCM podría significar no solo su derrota, sino también el final definitivo del chavismo-madurismo que durante años ha dominado el panorama político venezolano.
María Corina Machado, con su ímpetu y determinación, representa el anhelo de millones de venezolanos por un país renovado. Un país libre de la opresión y las malas prácticas que han caracterizado al régimen actual. Es comprensible que, ante tal adversaria, el gobierno busque retener su poder a toda costa. Pero, ¿a qué precio? La democracia y la voluntad popular no pueden ser sacrificadas en el altar del autoritarismo.
El adagio popular dice: «A correr Piojo que llegó el peine». Este refrán, en su sencillez, encapsula la situación actual. El «peine», en este caso, simboliza el cambio y la justicia. Y aquellos «piojos», las prácticas corruptas y autoritarias, no pueden esconderse por más tiempo. Venezuela, con sus vastos recursos y su gente resiliente, no merece ser la fábrica de parásitos que el chavismo-madurismo ha cultivado. Merece un nuevo amanecer, uno lleno de esperanza y progreso.
Es hora de que todos los venezolanos, con el mundo como testigo, reconstruyamos nuestra nación. El madurismo, con sus decisiones y acciones, solo ha reforzado la determinación del pueblo de Venezuela para seguir adelante. Maduro puede intentar frenar el avance democrático, pero no podrá detener el inquebrantable espíritu de un pueblo decidido a recuperar su país. La reconstrucción de una nueva Venezuela es inminente, y este acto desesperado del TSJ solo sirve como recordatorio de que el fin del chavismo-madurismo está a la vista.
Vierne5/ Editorial.
Victor Julio Escalona
Editor.