Vierne5 / Los principales aeropuertos de Alemania, entre ellos los de Fráncfort y Múnich, vivían este viernes una jornada de parálisis por la huelga de empleados aeroportuarios que han obligado a replantear los vuelos, exigiendo mejoras salariales.
El paro del personal en tierra ha causado ya un gran impacto en la economía y en el tráfico de pasajeros, que han debido aguardar contra su voluntad los traslados previstos.
El llamado a la huelga afecta a siete aeródromos que reúnen dos tercios de los vuelos de pasajeros del país, una parálisis que estará vigente hasta la madrugada de este sábado.
En previsión del impacto que la huelga tendrá en sus operaciones, quedaron suspendidos los vuelos comerciales de los aeropuertos de Fráncfort, Múnich, Stuttgart y Hamburgo.
El aeropuerto de Fráncfort es el mayor de Alemania y el de mayor tráfico aéreo de la Unión Europea (UE), y la compañía que lo gestiona, Fraport, ya calificó las consecuencias de la huelga como «desproporcionadas».
La empresa destacó que para el viernes estaban previstos mil cinco movimientos entre despegues y aterrizajes, y que se verán afectados por su cancelación aproximadamente 137 mil pasajeros.
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